Puerta corredera en un grosor levemente mayor al de un tabique


Con frecuencia, en casas ajustadas de tamaño, el espacio batido por una puerta impide situar donde queríamos un mueble, como una cama o una cómoda, todos hemos deseado alguna vez, cambiar de lado la apertura de una puerta, o mejor aún, transformarla en puerta corredera.

En ambos casos, la transformación no resulta sencilla, pues cambiar de lado la apertura de la perta, supone cambiar el marco y con ello destrozar paredes y suelos, que habrá también que reparar o sustituir.

En el caso de que estemos dispuestos a meternos en semejante trabajo, conviene que sepamos que existen puertas correderas que se ocultan en la pared, de casi el mismo grosor de un tabique normal, y que por tanto no es obligatorio añadir a los 7 cm. de un tabique normal, otros 10 cm. más entre el espacio del hueco de la puerta y el segundo tabique que la cubre. En estas puertas correderas de nuevo diseño, en su versión más delgada, con una puerta de un grosor de 4 cm., que es el normal de una puerta, se introduce en un tabique de 9 cm., solo dos centímetros más de lo que ocupa un tabique normal. Una puerta de 80 cm. que abra solo 90 grados necesita mas de medio metro cuadrado de espacio que se desaprovecha para otro uso, con la utilización de estas puertas correderas este espacio queda libre..

El secreto esta en sustituir el tabique de un lado de la puerta, por una cámara de chapa metálica donde se introduce la puerta al abrirse. Esta cámara está especialmente preparada para recibir el enfoscado con la misma facilidad que lo hace el tabique de ladrillo, con lo que queda perfectamente disimulada con el resto de la pared. Más sencillo aún es cubrirla con una placa de Pladur.

La puerta puede ser de doble hojas, muy adecuada para separa por ejemplo un despacho del salón, manteniendo la posibilidad de fusionar ambos espacio en determinadas ocasiones. Incluso es posible, aumentando algo más el grosor del tabique, guardar una puerta doble a cada lado, es decir abrir un hueco entre dos habitaciones contiguas que llegue a ser hasta los dos tercios de la pared común.

Con todo, creo que el uso más práctico es usarla para dar paso a pequeñas estancias como cuarto de baños o vestidores, pues en ellos el espacio que barre la puerta es casi el único espacio libre que queda entre los muebles existentes. A veces nos vemos obligadoa a hacer contorsionismos sobre los sanitarios para abrir o cerrar la puerta desde dentro en algunos aseos, una puerta de este tipo puede facilitar el acceso estos cuartos. Igualmente no debemos olvidar que esta puede ser una solución para eliminar barreras arquitectónicas que impida el desplazamiento en silla de ruedas.

Cuando se incorporan elementos que van a quedar empotrados, debemos cuidar su calidad y lo idoneo de la instalación, pues una pequeña avería como el desgaste de un rodamiento pudiera dar a roturas del tabique para poder tener acceso a la zona averiada, por tanto conviene acudir a empresas expeertas en estos menesteres y no se admituir soluciones artesanales. Así mismo la instalación de puertas correderas precisa de un exigente nivelado, y mayor cuidado que una puerta normal, por lo es preferible confiarlo a personal experimentado en este tipo de soluciones.

Los modelos que he encontrado de puertas correderas están pensados para puertas de interior, he encontrado también puertas correderas de exterior, pensadas para garajes por ejemplo, pero normalmente se mueven sobre un carril a la vista paralelo al muro y no quedan empotradas, pues es otro su objetivo y su preocupación estética. Si alguien desea una puerta corredera del tipo indicado que aguante la intemperie, para el paso a una terraza o algo similar, deberá ponerse en contacto con el fabricante en búsqueda de una solución concreta a su caso pues al menos yo no encontrado soluciones estandard..

Una última recomendación que puede parecer tonta, pero que se olvida con frecuencia, es que no se puede colocar llaves de la luz empotradas ni soportes de cuadros en el falso tabique que oculta la corredera, su fino grosor no admite empotrar o clavar nada en el sin que estorbe en la cámara donde se guarda la puerta, habrá que colocar la luz de la entrada al cuarto en un lugar mas alejado de la puerta d lo habitual, aunque en cuartos interiores podemos colocar sistemas domóticos que encienden la luz al detectar la presencia de alguien por volumetría .

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Maydisa.. Fabricante de puertas correderas
Eclisse , Fabricante de puertas correderas