El Programa de Fomento del Alquiler Garantizado (PFAG) ha llevado a cabo un estudio en torno a diferentes agencias inmobiliarias (un total de 500) donde se ha extraído una interesante conclusión: en los dos primeros meses de 2007 el número de propietarios interesados en alquilar su vivienda aumentó un 10 por ciento, al tiempo que el número de personas dispuestas a vivir de alquiler crecía en un 30 por ciento.
Puede ser que el periodo que abarca el estudio resulte un tanto reducido pero es una buena primera toma de contacto con la realidad. Debería ampliarse el espacio de tiempo para verificar que esta tendencia está realmente produciéndose y no es cuestión de un simple momento puntual.
Las estadísticas señalan que de todas las operaciones ejecutadas por las agencias inmobiliarias sólo el 10% corresponden al alquiler. Este dato refleja la diferencia existente entre España y Europa, ya que en esta última las operaciones de alquiler alcanzan hasta el 40% de las operaciones.
Los tramos de precios que se solicitan por el alquiler de una vivienda son los siguientes: el 38% de la oferta se sitúa por debajo de los 600 euros, el 32% oscila entre los 600 y los 1.000 euros, por último, las rentas superiores a los 1.000 euros representan un 27% de la oferta.
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