El Banco Santander vende todos los inmuebles que posee en España para hacer frente a la compra de ABN Amro

Una millonaria operación inmobiliaria es la que va a realizar el Grupo Santander al poner a la venta todo el patrimonio inmobiliario que posee en suelo español, la venta moverá un volumen de 4.000 millones de euros que en principio sirve para cubrir parte de la financiación necesaria para absorber ABN Amro, un grupo holandés que ocupa la undécima posición europea de activos y que posee más de 3.000 sucursales repartidas en 60 países.

La valoración actual del grupo holandés alcanza los 71.100 millones de euros, fruto de la oferta que ha realizado el Santander, el Royal Bank of Scotland y Fortis, cada entidad aportará una parte, así Fortis aportará 24.000 millones de euros, Bank of Scotland 27.200 millones de euros y 19.900 millones de euros el Santander. Tras la compra, la intención será disgregar la empresa y repartirla entre las tres entidades financieras.

El Santander desembolsará 19.900 millones de euros con el propósito de absorber hasta un tercio del volumen total de negocio que posee el grupo holandés. Se venden los inmuebles pero se mantiene como inquilino en ellos, aunque no todos los inmuebles han sido traspasados, solamente el complejo que posee en Boadilla del Monte (Madrid), sede actual de la entidad financiera, se libra del traspaso.

La fuerte desinversión realizada por el Santander ha generado unas plusvalías que rondan los 1.400 millones de euros. La estrategia marcada resulta sorprendente, con ella se podrá obtener una fuerte presencia en el mercado brasileño e italiano, mercados interesantes para las entidades bancarias actualmente. Esta nueva situación obliga a una nueva reestructuración debiendo combinar la deuda, la desinversión y la nueva emisión de acciones que representarán una ampliación del capital en torno a los 4.500 millones de euros.

La venta inmobiliaria realizada es una jugada que de momento ha suscitado cierta desconfianza, tan sólo hay que comprobar que ayer mismo las acciones de la entidad habían caído un 2,28%. La propiedad de los inmuebles son una parte muy importante de cualquier entidad financiera, desprenderse de ellos es quizás una jugada algo temeraria.